Conor O´Malley (Lewis MacDougall) es un chico que a sus 13 años ha tenido que asumir muchas responsabilidades. Tras la separación de sus padres y la grave enfermedad que padece su madre (Felicity Jones), se ha visto obligado a tomar las riendas de su hogar. Además, debido al acoso escolar que sufre en el colegio, ha creado un mundo de fantasía plagado de hadas, duendes y demás criaturas maravillosas, que le permite escapar de su rutina y superar sus miedos. Porque incluso en su propio ambiente familiar, su inventiva tiene que enfrentarse incluso con la visión de su fría y calculadora abuela (Sigourney Weaver).
El autor de este cuento infantil, Patrick Ness, también guionista del film permite que su director, Juan Antonio Bayona pueda estirar el metraje para recrear su lado melodramático a la vez que el fantástico. Un cuento o unos cuentos dentro de un cuento sobre las tinieblas que envuelven nuestras vidas pero gracias a las cuales podemos iniciar un viaje emocional donde el drama no es más que la diferencia entre el mundo infantil con la del mundo adulto. Un relato adecuado para la adolescencia, esa fase en la que el ser humano crea sus propios demonios, sus miedos frente a la realidad, y que el protagonista compensa con la válvula de escape de una ficción terrorífica, pero terapéutica.
En Un monstruo viene a verme lo real y melodramático de la vida de Connor es la separación de sus pedres pero también la enfermedad irresoluble de su madre, y por tanto de la muerte y la complejidad de la vida. A partir de ahí nace la cita a los siete minutos pasada la media noche con su “monstruo” a través de la cual se inicia la fantasia de los encuentros de ese árbol gigantesco con el niño. Una fantasía que a modo de tres cuentos en forma de fábula le guiaran hasta la madurez.
A diferencia del cuento, la película combina una animación que gracias a sus sorprendentes técnicas permite suggerir el terror per a la vez la fantasía modelada de sentimientos y pensamientos útiles para sobrellevar la realidad. Esta adaptación al cine ha sabido captar la emotividad, sensibilidad y valores subyacentes en la historia original que emergent durante la adolescència.