A partir del libro autobiográfico de la autora Helen Prejean “Dead Man Walking”, basada en hechos reales, Tim Robbins escribió y dirigió la película “Pena de muerte”.
El film gira entorno a las vivencias de Matthew Poncelet durante su estancia en el corredor de la muerte de un penitenciario de Luisiana. Condenado a la pena capital por asesinar a dos adolescentes, sostiene que él no fue el autor de los hechos, sino un amigo suyo. Angustiado, empieza a escribirse con una monja llamada Helen Prejean, a la que pide ayuda.
La semana anterior a la ejecución, Helen intentará que Matthew consiga la absolución y la paz espiritual. Pero a la hermana Helen también le preocupa el dolor de las familias de las víctimas, a las que ofrece su ayuda. Sin embargo, éstas, dolidas con ella por intentar salvar al asesino de sus familiares, la rechazan.
Faltando pocas horas para su ejecución y sin que hayan conseguido la absolución, el joven condenado le confiesa a la hermana Prejean que sí que cometió los crímenes y que se arrepiente de ellos, con lo que sólo aspira a morir en paz consigo mismo De este modo, Helen Prejean lo acompañará hasta el último momento de la ejecución en calidad de consejera espiritual.
En definitiva, la película “Pena de muerte” plantea una interesante reflexión acerca de la última pena. Además, explora los límites y los excesos de una relación de ayuda.
La actriz Susan Sarandon ganó el Óscar a la mejor interpretación en el año 1995 al encarnar a la religiosa Helen.