Preparar adecuadamente y con el tiempo suficiente es básico para lograr una despedida hermosa, emotiva, y acorde con los deseos de quien se despide de nosotros. Parece obvio, pero habitualmente se olvida de lo importante de dejar un buen recuerdo para preparar el luto.
La legislación española está anticuada en este aspecto, y no regula ni facilita el poder planificar un funeral acorde con las convicciones o los criterios ecológicos del difunto.
Cierto es que no estamos acostumbrados a pensar en nuestro funeral cuando estamos sanos, aún existiendo la evidente posibilidad de morir de accidente o similares, con lo que en casos así es normal que no tengamos tiempo ni si siquiera pensamientos firmes de qué hacer en el caso de fallecer repentinamente.
¿Pero y en el caso de personas que contraen enfermedades letales, o pacientes que se encuentran en fase terminal? En casos así, tanto los afectados, como familiares y amigos, deberían de planificar correctamente el tiempo para poder escoger el mejor recuerdo como parte del vivir.
Aún incluso en casos de muerte repentina se puede ganar algo de tiempo para programar una ceremonia acorde con nuestros pensamientos. Es lo que ofrecen las compañías que preparan ceremonias sin el cuerpo del difunto. Esto da más tiempo de reflexión del como y el con quién queremos despedir al ser que muere. Y sabemos que un buen rito funerario es esencial para afrontar el duelo que sigue a toda defunción de un ser querido.
Al fin y al cabo de lo que se trata es de crea una ceremonia de recuerdo.
Para ello existen conocidos elementos, como por ejemplo las coronas de flores. Si queremos hacer la ceremonia con conciencia medioambiental incluso podemos escogerla ecológica. En estos casos, el elemento se compone de rosario de tiestos de plantas ornamentales que podemos desensamblar y entregar a los asistentes y así cada planta se convierte en un recuerdo vivo.
La cuestión clave que nos planteamos en un ecofuneral es como hemos argumentado la de recordar a la muerte como parte de la vida. Ya sean elementos de recuerdo de un funeral, o versiones más actuales, como páginas web de recuerdo, lo que se busca es un recuerdo de la muerte como parte de la vida.
Es sabido que la industria funeraria explota el recuerdo como beneficio propio, pero está en nuestra mano no caer en tales prácticas. Dónde unos proponen joyas para los difuntos, nosotros podemos decidir ritos solemnes. Lo importante al fin y al cabo es aligerar el peso del funeral, o incluso intervenir para desmaterializarlo.
