Alba, una niña de 7 años que vive felizmente con su familia. De golpe su mamá tiene una enfermedad llamada Cáncer y dejan de hacer todo lo que solían hacer juntas porque mamá está muy enferma en el hospital. Mamá se muere y Alberto, el papá de Alba la ayuda a entender que ha pasado y vivir estos dolorosos momentos con mucho amor, recordándole a Alba que «mamá siempre estará en nuestro corazón».
La muerte con ojos de niño
¡Gracias Vida! es un emotivo cuento infantil destinado a ayudar a los más pequeños a entender la muerte y el doloroso proceso que conlleva, visibilizando sentimientos ocultos. Rosa María Rodríguez Tellez, la autora de este libro, es enfermera de profesión des del 2006. Tras la muerte de su cuñada, dando a luz a su tercer hijo, estuvo buscando literatura infantil para ayudar a su sobrina de 7 años a entender lo que había pasado. Se dio cuenta de que había muy poca literatura infantil dedicada a la muerte y que lo que había la trataban de una manera muydifusa, muchas veces confundiéndola con un “dormir eterno”, concepto totalmente distinto.
De ahí surgió la necesidad de crear ¡Gracias Vida! La autora confiesa que escribir siempre ha sido su gran pasión. Se describe a si misma como alguien altruista y que le gusta ayudar a los demás, y este amor hacia la gente se ve reflejado en su libro, el cual está escrito con gran delicadeza y sensibilidad, teniendo muy presente las emociones por las que transcurre el proceso del duelo.
El libro nos cuenta la historia de Alba, una niña de 7 años que de repente se tiene que enfrentar al Cáncer que sufre su mamá. Esto hace que las dos dejen de hacer todo aquello que solían hacer juntas y entristece a Alba. Un día al volver del cole Alba se encuentra con toda su familia en casa y no es su cumpleaños. Su papá, llorando, le dice que mamá ha muerto, que se ha convertido en la estrella más brillante del cielo. Alba llora muchísimo, está muy triste. Su tía para relajarla un poco le da un baño y Alba le dice que le ha pasado como a Symba, pero en vez de a papá ha perdido a mamá, y que si era verdad lo que decía Rafiki, el mono del Rey León, que mamá siempre estará en ella. Su tía con una cálida sonrisa le dice que sí, que ella siempre estará en su corazón.
Ahora Alba y su padre lo hacen todo juntos y charlan mucho sobre mamá, sobre los recuerdos que tienen de ella. Un día que salen al campo Alba le pregunta a su padre que es la muerte y este se lo cuenta con margaritas. Después de contemplarlas, admirar su belleza y su olor cogen un ramillete y se lo llevan a casa. Antes de irse a dormir Alberto le dice a Alba que las deje fuera del agua. Al día siguiente la niña se las encuentra marchitas. Le dice a su padre que eso es porque las han dejado fuera del agua. Papá le cuenta que eso es la muerte. Las flores ya no tienen el color que tenían ayer ni el aroma, ya no tienen vida porque las han sacado de su familia, les han sacado su raíz que es como el corazón de las personas, y las han dejado sin agua, que es como la salud para las personas. Y eso mismo nos pasa a nosotros cuando morimos. Si nuestra salud no funciona, puede fallarnos nuestro corazón, quedarnos sin vida y marchitarnos como las flores. Entonces hacen un ejercicio de recordar las flores, su olor y sus colores. Alba lo recuerda todo con mucho detalle. Su papá le dice que nunca podrá olvidarse de ellas, de la misma manera que no se puede olvidar de mamá, que su recuerdo siempre estará en su corazón.
Los recuerdos vividos con las personas que amamos son el tesoro más hermoso que guarda nuestro cerebro y los sentimientos que tenemos hacia las personas que queremos, aunque hayan muerto, son los tesoros más profundos de nuestro corazón.