Tessa es una joven a la que le han diagnosticado leucemia y, después de exponerse durante cuatro años al tratamiento de quimioterapia, los médicos le han dicho que su enfermedad es irreversible.
No quiere pasar sus últimos días en un hospital ni martirizarse por lo que le ocurre, así que se toma la enfermedad con filosofía.
Más que incluso algunos de sus familiares.
Tessa hace una lista con las cosas que le gustaría hacer antes de morir.
Una historia recurrente
Existen diversas películas en las que los protagonistas son adolescentes y la muerte ronda a su alrededor.
Bajo la misma estrella reúne a dos adolescentes con cáncer que se enamoran y pasan unos meses juntos.
Cuando el amor es para siempre, narra la la compleja historia de amor entre dos adolescentes que comparten sus preocupaciones sobre la mortalidad.
Ahora y siempre, es la historia de una chica de 17 años con leucemia terminal que escribe una lista de las cosas que quiere hacer antes de morir.
No se puede decir que sea una película remarcable y hay mucho de autoayuda con multitud de grandes frases sobre la vida, incluso una buena dosis de un estoicismo liviano.
Es una película que, sin embargo, como expresa su protagonista al principio, nos invita a reflexionar sobre nuestra existencia cotidiana.
La película gira pues entorno a una cuestión que debería ser básica: ¿Si sabes que vas a morir pronto que harías?
En este caso la protagonista decide que tiene una serie de cosas que hacer antes de morir, es decir, una «lista» en la que se incluyen cosas fáciles y otras algo más complejas.
La trama es conmovedora aunque algo simplona acerca de lo efímero de la vida y las relaciones interpersonales con una inconclusa historia de amor.